Correr sin rumbo, sin crono, sin móvil y sin música...

Muchas veces menos es mas... alguien decía que con frecuencia lo mas sofisticado suele ser lo mas sencillo.

Te calzas las zapatillas, miras el reloj de casa, guardas las llaves y a correr... Llevas un par de ideas claras: evitar avenidas con muchos semáforos, es de noche, buscar zonas que se vea bien para centrarte solo en las sensaciones.
Llevaba un mes sin correr, prefiero evitar el asfalto porque al final se me resiente un gemelo pero sé que de vez en cuando puedo engañar al cuerpo. Es lo bueno de correr poco... ese día pese a todo estás motivado, es una novedad y las sensaciones se intensifican.

Sé que después de los 9 minutos iniciales donde te duele todo y vas fatal, comienzan a funcionar las endorfinas y drogas del cuerpo y los dolores se mitigan... hacia el minuto 15´ ya has calentado bien y desde ahí hasta el minuto 40´, mas o menos, vas eufórico, corres genial y hasta aprietas para apurar en algún semáforo... después del minuto 45´ notas la falta de entreno, aflojas, haces una vuelta a la calma y vuelves pasando la hora de forma tranquila.

Ducha sin enfriarte para encontrarte super sensacional.

También soy consciente de que no puedo repetir el entreno hasta pasado 2 ó 3 días porque entonces se que el gemelo se me resentirá y por eso no me planteo ni continuidad ni retos. Intento correr en tierra lo mas posible, rio Llobregat o por montaña pues, es menos traumático que el asfalto, así que en un día de viento,  de noche ó no tienes rodillos.. salir a rodar una hora es el entreno mínimo para mantener la forma física y de paso experimentar sensaciones muy interesantes en un entreno mas terapéutico-mental que físico que no encontrarías sobre una cinta de gimnasio.
 Total: una hora mas ó menos para 10´5Kms calculado con EKIBIKE a posteriori en casa.

!!!MENOS ES MAS!!!